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Museo Histórico Nacional

Detalles para ver XI

Óleo sobre tela. Autor: Charles Fouqueray, 1909. (Medida: 3020 x 2430 mm). Préstamo de la Presidencia de la Nación, 26-XII-1946.

El puño se nos presta a un juego de significados. El puño parece vivo frente a la muerte del combatiente: ¿Entonces qué nos representa?. Puede ser el triunfo de la vida, más allá de la muerte; de la vida dada en una cruenta lucha, pero que supera a la misma, por los valores implícitos en las jornadas de la Reconquista. Es el triunfo del pueblo frente al invasor y en este sentido expresa y simboliza, la vida de la comunidad, del pueblo de Buenos Aires, que ha sabido defender su terruño.
Diego Álvarez Barrañaga, la muerte de un valiente: “ Don Diego Álvarez Barragaña no siendo un sujeto de mayores facultades sino precisamente contraído a un corto giro, lo abandonó todo, olvidó a su familia y solo pensó contribuir por su parte a la reconquista de esta ciudad, saliendo para ello a la campaña (...) asistió a la gloriosa acción del día doce de agosto y en ella se portó como un héroe de los de primera clase, acometiendo y avanzando por todas partes, sin haber decaído su ánimo aún herido de muerte, hasta que enteramente le faltaron los alientos. Su lealtad y patriotismo le hacían sobrellevar con serenidad los padecimientos, y este Cabildo tuvo la grande satisfacción de oírle decir con la mayor entereza, un día antes de su fallecimiento, que los dolores y la misma muerte le eran nada, cuando veía restaurada la Patria y restituida a la dominación de Vuestra Majestad; con esos sentimientos del más acrisolado vasallaje murió este héroe, dejando sin auxilio alguno a su desdichada viuda doña Martínez Nuñez y a sus cinco hijos menores” (Informe elevado al Rey por el Cabildo porteño el 26 de octubre de 1806).
FUENTE: “1806. Reconquista de Buenos Aires” en “Episodios Militares de Nuestra Historia”, Marzo 2006, Año 1, Nº 1, p 57.